Luego del último informe de la contraloría

"¡¿Justicia Divina!?" (palabras expresadas por la ministra de educación Yasna Provoste luego que el balotage arrojara que los 5 parlamentarios que verán su acusación constitucional son de la concertación.

(Fuente: www.pautaregional.cl)

Según contralor Ramiro Mendoza: “Desorden contable del Mineduc llega a 1,4 billones de pesos.”

Con sabia prudencia, el Contralor Ramiro Mendoza, presentó a la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, la versión de ese organismo fiscalizador respecto de las dudas que aún persisten sobre los “desórdenes en la entrega de subvenciones educacionales”.

En un documento de 30 páginas, Mendoza explica como la entidad descubrió, indagó y estableció las anomalías en las conciliaciones bancarias y de las que se dedujo “las irregularidades en la entrega de los 262 mil millones de pesos en subvenciones”, tema que ayer ratificó el Contralor.

En el texto se precisa que “la conciliación bancaria es la tarea de cotejar las anotaciones que figuran en las cartolas bancarias con el libro banco a los efectos de determinar si existen diferencias y, en su caso, el origen de las mismas.” En seguida señala que “la conciliación permite verificar la igualdad entre las anotaciones contables y las constancias que surgen de los resúmenes bancarios, efectuando el cotejo mediante un básico ejercicio de control, basado en la oposición de intereses entre la institución y el banco, explicando que la conciliación bancaria NO es un registro contable, sino una herramienta de control.”

En el mismo tenor, el informe de la Contraloría señala que como la conciliación bancaria es una herramienta básica de control, al carecer de ella se produce un desorden financiero y administrativo, por cuanto la entidad no tiene certeza acerca de los dineros disponibles, como tampoco del destino de estos mismos, es decir, se pierde el control de los depósitos, los giros y pagos de cheques y otros cargos y abonos efectuados por el banco.”

Otro aspecto importante, es que la tan mentada “conciliación bancaria” permite, según explica el documento “determinar el manejo de los ingresos y egresos de la Institución, disminuyendo el riesgo de ilícitos o usos indebidos del efectivo.”

En su presentación también advirtió que “el desorden de las cuentas implican a $1.4 billones de pesos y que sólo una vez reorganizados y las glosas contables cuadradas se podrá hacer una auditoría global para acreditar si los dineros fueron o no bien gastados”.

Las conciliaciones deben realizarse, como mínimo, una vez al mes.